Sic transit gloria mundi
El leve crujir de la viga de la que cuelga su padre; el
intenso olor a tabaco; la botella de ginebra medio vacía; el libro de Cernuda
tirado en el suelo; la foto de su boda partida en dos; la luz difusa de una
lámpara de mesa; la tele apagada, sin vida…
El niño siente un enorme desasosiego. Con casi aprensión o
asco, se acerca más al cuerpo rígido de su padre. Primero le toca las medias
rojas de seda. Luego, haciendo un ligero escorzo, mira por debajo de la
minifalda que lleva puesta.