*Rèplica del transatlàntic / réplica del
transatlántico Queen Mary (dècada de
1940)
Bajo tierra
Construía barcos en miniatura. El último era la réplica exacta de un transatlántico que introdujo en una botella. Pero esa vez no hizo algo bien. Una vía de agua penetró en el casco del barco y produjo un naufragio. No hubo supervivientes, y a él no le cupo más remedio que recoger los cientos de ahogados con unas pinzas y enterrarlos, uno a uno, bajo la tierra de una maceta.
(Por segunda vez he tenido la fortuna de ser el ganador del concurso que organiza mensualmente Lamicrobiblioteca.)
Enhorabuena, Ricardo. Un par de miniaturas (la de la botella y el microrrelato) muy bien construidas. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Víctor. Pero la miniatura de la botella no estaba bien construida, de ahí el naufragio. Un fuerte abrazo.
EliminarBueno eso ocurre cuando se hace una réplica tan exacta. Felicidades Ricardo.
ResponderEliminarAnónimo, tienes razón. Esas réplicas las carga el diablo. Un abrazo.
EliminarPobres náufragos, al final abonaron las plantas del constructor. Enhorabuena y un abrazo.
ResponderEliminarEl constructor les dio un entierro a la medida de su tamaño. Qué se le va a hacer! Un beso, Elisa.
ResponderEliminar¡Enhorabuena! Ya sé que no está nada bien, pero no pude evitar reír con esa imagen de las pinzas rescatando miniahogados.
ResponderEliminarBesitos
Elysa: mira, has encontrado una lectura cómica en la que no había pensado. Ya sabes lo que dijo Woody Allen: Comedia=Tragedia+Tiempo.
ResponderEliminarBesos.
Enhorabuena, Ricardo.
ResponderEliminarAbrazos fuertes
Gemma: me alegra verte de visita por aquí. Muchas gracias, y un beso.
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